El papa Benedicto XVI defendió ayer con fuerza a las familias tradicionales y los derechos de los nonatos, al criticar directamente las leyes españolas que permiten el matrimonio entre homosexuales, el divorcio y el aborto, mientras consagraba la emblemática basílica de Barcelona, la Sagrada Familia.
En abierto desafío a las posturas del Pontífice, un centenar de activistas gays y lesbianas se besaron al paso del automóvil de Benedicto XVI cerca de la plaza de la Catedral de Barcelona, cuando este se dirigía al templo de la Sagrada Familia.Leer Mas
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