La muerte de la funcionaria Rosalina Ynoa ha dejado un gran vacío no solo en el seno de su familia, sino también en el Gobierno.
“Mi amor, cierra los ojos y estaré junto a ti. Siente mi abrazo al caer el agua. Siempre tuya”, fue el último mensaje que le escribió al padre de sus cuatro hijos con edades entre 9 y 19 años antes de partir a España a cumplir compromisos laborales como directora ejecutiva de la Unidad de Análisis y Coordinación de la Cooperación Internacional del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPYD)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario