En
un fin de semana de enero del 2010, Sony Pictures y Marvel Studios
fueron protagonistas de un vuelco tan rápido y drástico, que solo los
sentidos arácnidos de Spiderman lo captaron. Una cuarta parte de la
popular franquicia estaba planeada, con el director Sam Raimi y el actor
Tobey Maguire
listos para volver a los roles que habían tenido en la trilogía que
recaudó más de 2.500 millones de dólares en todo el mundo. Pero tras ese
fin de semana, el descontento de Raimi con el guión chocó con las
ansias de los productores de sacar rápidamente la película. En un abrir y
cerrar de ojos, la idea de la secuela estaba descartada y se optó por
lanzarse con un “reboot”, es decir, partir de cero la saga.
Este jueves 5 de julio veremos el resultado: la cinta “El sorprendente Hombre Araña”, que marca precisamente un nuevo inicio de la serie de películas, apenas cinco años después del estreno de “Spiderman 3”.
Usualmente los reinicios de las franquicias cinematográficas demoran bastante más en llegar, pero para los estándares actuales “cinco años son toda una vida”, afirma Amy Pascal, co-presidente de Sony Pictures. “No es algo que me sea problema”, añade.
Las razones para los “reboots” varían desde despertar sagas algo dormidas (“Star Trek”), refrescar algunas que llevan mucho tiempo (James Bond) o mejorar fallidos intentos iniciales (“Hulk”).
El caso de Hulk es cercano, ya que también lo intentó dos veces con apenas cinco años de diferencia (2003 y 2008), además bajo el alero de Marvel y Universal Pictures. De forma similar, el nuevo Superman (titulada “Man of Steel”) saldrá el próximo año de la mano de Warner Bros., en un nuevo inicio para el personaje de DC Comics tras la desilusión que provocó “Superman retorna” el 2006.
MANIOBRAS OSADAS
Está claro que “El sorprendente Hombre Araña” llega muy cerca de sus cintas antecesoras dirigidas por Raimi. Pese a que la preferencia de Sony era hacer una cuarta película con el mismo equipo, Pascal ahora afirma que en ese momento se equivocaron al buscar “una historia que no estaba ahí”, luego de la conclusión que se sintió con “Spiderman 3”.
Eso significa que El sorprendente Hombre Araña, que costó unos 200 millones de dólares, es una maniobra osada, destinada a “sufrir” de las comparaciones con las películas anteriores y el escepticismo de algunos espectadores ante un escenario renovado.
Para combatir cualquier “fatiga” que pueda existir con el personaje, Sony quiso darle nuevos aires dándole una apariencia en 3D y en tono más juvenil: Andrew Garfield es Peter Parker, Emma Stone es su novia Gwen Stacy y Marc Webb, cuya filmografía previa incluye “500 días con ella”, es el director.
“El único momento para tomarse un descanso es cuando tu franquicia fracasa”, afirma Avi Arad, productor de la película y ex timonel de Marvel Studios. “La gente quiere a Spiderman, así que es nuestra responsabilidad darles algo nuevo, algo diferente y empezar una generación nueva de seguidores”, añade.
LA HISTORIA DEL NUEVO HOMBRE ARAÑA
La visión de la película de Marc Webb, escrita por James Vanderbilt, Alvin Sargent y Steve Kloves, recorre la historia de Parker como huérfano, partiendo cuando aún vivía con sus padres. Esto también implica su paso por la escuela secundaria, repasando algunas situaciones que ya se cubrieron en las películas de Raimi, como cuando Parker es mordido por la araña radioactiva que le concede habilidades sobrehumanas, la muerte de su tío y algunas piruetas en los pasillos de su colegio.
“No es que estemos contando exactamente la misma historia del origen como lo hizo Sam (Raimi), pero siento que era importante para una nueva historia el entender al personaje desde la base. Creo que la inflexión del personaje es bastante diferente a lo que hemos visto antes”, dice Webb.
Se trata de un cambio más cercano al del Spiderman de los cómics: la versión de Garfield del superhéroe es más sarcástica y agitada. Representa efectivamente a un adolescente rebelde.
El actor británico de 28 años, que ganó reconocimiento por su papel en “Red social”, viene de llenarse de más aplausos por su actuación en la obra “Death of a Salesman” presentada en Broadway.
Siendo un fanático de los cómics desde su niñez, Garfield dice que tomar el papel no fue tanto una decisión profesional, sino que simplemente considerar “los gritos del niño de tres años que guardo en el interior”.
“Con Spiderman, el legado es gigante. Hay tanto a lo que rendirle homenaje y respetar, que debes estar consciente de lo que más sea posible”, advierte Garfield.
Luego de narrar algunos momentos emblemáticos de la historia de Spiderman, la película introduce a un nuevo villano extraído de los cómics: el Lagarto, una transformación del científico Curt Connors (Rhys Ifans).
UNA NUEVA GENERACIÓN DE SEGUIDORES
La película es un recordatorio de que Spiderman sigue siendo un superhéroe joven y la película funciona como una historia de transición hacia la madurez. Si “Spider-Man 4” hubiese seguido en marcha con Tobey Maguire, ahora de 36 años, los productores afirman que definitivamente habría sido la última de la serie.
“Una buena parte del ADN de Peter Parker es su cualidad adolescente”, dice Webb, cuya comedia romántica “500 días con ella” era también sobre el camino hacia la adultez. “Es un momento de tu vida cuando eres imperfecto y poco pulido, cometes errores y descubres cosas, cada emoción es apocalíptica”, comenta.
“Quiero vivir en un mundo donde las historias de Spiderman son contadas una y otra vez”, dice el productor Matt Tolmach. “A veces, la gente deja las cosas en un cajón por demasiado tiempo”, añade.
También se trata de una franquicia enormemente lucrativa, con gran cantidad de productos anexos y populares videojuegos. “El sorprendente Hombre Araña” se encarga de mantener aceitada esa máquina.
Las primeras críticas en Estados Unidos han sido en general positivas y las expectativas de taquilla son bastante altas. Es tanto el optimismo que ya se está trabajando en una secuela, que debería comenzar a filmarse el próximo año. El gran éxito de “Los Vengadores” aumentó además las especulaciones de que Spider-Man pudiese integrarse a ese equipo de superhéroes, algo a lo que Arad responde: “Todo es posible”.
De cualquier forma, las posibilidades futuras de “Spiderman” son nuevamente ilimitadas. “Esto puede generar muchas películas”, advierte Arad, augurando un buen escenario para el personaje.
Este jueves 5 de julio veremos el resultado: la cinta “El sorprendente Hombre Araña”, que marca precisamente un nuevo inicio de la serie de películas, apenas cinco años después del estreno de “Spiderman 3”.
Usualmente los reinicios de las franquicias cinematográficas demoran bastante más en llegar, pero para los estándares actuales “cinco años son toda una vida”, afirma Amy Pascal, co-presidente de Sony Pictures. “No es algo que me sea problema”, añade.
Las razones para los “reboots” varían desde despertar sagas algo dormidas (“Star Trek”), refrescar algunas que llevan mucho tiempo (James Bond) o mejorar fallidos intentos iniciales (“Hulk”).
El caso de Hulk es cercano, ya que también lo intentó dos veces con apenas cinco años de diferencia (2003 y 2008), además bajo el alero de Marvel y Universal Pictures. De forma similar, el nuevo Superman (titulada “Man of Steel”) saldrá el próximo año de la mano de Warner Bros., en un nuevo inicio para el personaje de DC Comics tras la desilusión que provocó “Superman retorna” el 2006.
Está claro que “El sorprendente Hombre Araña” llega muy cerca de sus cintas antecesoras dirigidas por Raimi. Pese a que la preferencia de Sony era hacer una cuarta película con el mismo equipo, Pascal ahora afirma que en ese momento se equivocaron al buscar “una historia que no estaba ahí”, luego de la conclusión que se sintió con “Spiderman 3”.
Eso significa que El sorprendente Hombre Araña, que costó unos 200 millones de dólares, es una maniobra osada, destinada a “sufrir” de las comparaciones con las películas anteriores y el escepticismo de algunos espectadores ante un escenario renovado.
Para combatir cualquier “fatiga” que pueda existir con el personaje, Sony quiso darle nuevos aires dándole una apariencia en 3D y en tono más juvenil: Andrew Garfield es Peter Parker, Emma Stone es su novia Gwen Stacy y Marc Webb, cuya filmografía previa incluye “500 días con ella”, es el director.
“El único momento para tomarse un descanso es cuando tu franquicia fracasa”, afirma Avi Arad, productor de la película y ex timonel de Marvel Studios. “La gente quiere a Spiderman, así que es nuestra responsabilidad darles algo nuevo, algo diferente y empezar una generación nueva de seguidores”, añade.
La visión de la película de Marc Webb, escrita por James Vanderbilt, Alvin Sargent y Steve Kloves, recorre la historia de Parker como huérfano, partiendo cuando aún vivía con sus padres. Esto también implica su paso por la escuela secundaria, repasando algunas situaciones que ya se cubrieron en las películas de Raimi, como cuando Parker es mordido por la araña radioactiva que le concede habilidades sobrehumanas, la muerte de su tío y algunas piruetas en los pasillos de su colegio.
“No es que estemos contando exactamente la misma historia del origen como lo hizo Sam (Raimi), pero siento que era importante para una nueva historia el entender al personaje desde la base. Creo que la inflexión del personaje es bastante diferente a lo que hemos visto antes”, dice Webb.
Se trata de un cambio más cercano al del Spiderman de los cómics: la versión de Garfield del superhéroe es más sarcástica y agitada. Representa efectivamente a un adolescente rebelde.
El actor británico de 28 años, que ganó reconocimiento por su papel en “Red social”, viene de llenarse de más aplausos por su actuación en la obra “Death of a Salesman” presentada en Broadway.
Siendo un fanático de los cómics desde su niñez, Garfield dice que tomar el papel no fue tanto una decisión profesional, sino que simplemente considerar “los gritos del niño de tres años que guardo en el interior”.
“Con Spiderman, el legado es gigante. Hay tanto a lo que rendirle homenaje y respetar, que debes estar consciente de lo que más sea posible”, advierte Garfield.
Luego de narrar algunos momentos emblemáticos de la historia de Spiderman, la película introduce a un nuevo villano extraído de los cómics: el Lagarto, una transformación del científico Curt Connors (Rhys Ifans).
UNA NUEVA GENERACIÓN DE SEGUIDORES
La película es un recordatorio de que Spiderman sigue siendo un superhéroe joven y la película funciona como una historia de transición hacia la madurez. Si “Spider-Man 4” hubiese seguido en marcha con Tobey Maguire, ahora de 36 años, los productores afirman que definitivamente habría sido la última de la serie.
“Una buena parte del ADN de Peter Parker es su cualidad adolescente”, dice Webb, cuya comedia romántica “500 días con ella” era también sobre el camino hacia la adultez. “Es un momento de tu vida cuando eres imperfecto y poco pulido, cometes errores y descubres cosas, cada emoción es apocalíptica”, comenta.
“Quiero vivir en un mundo donde las historias de Spiderman son contadas una y otra vez”, dice el productor Matt Tolmach. “A veces, la gente deja las cosas en un cajón por demasiado tiempo”, añade.
También se trata de una franquicia enormemente lucrativa, con gran cantidad de productos anexos y populares videojuegos. “El sorprendente Hombre Araña” se encarga de mantener aceitada esa máquina.
Las primeras críticas en Estados Unidos han sido en general positivas y las expectativas de taquilla son bastante altas. Es tanto el optimismo que ya se está trabajando en una secuela, que debería comenzar a filmarse el próximo año. El gran éxito de “Los Vengadores” aumentó además las especulaciones de que Spider-Man pudiese integrarse a ese equipo de superhéroes, algo a lo que Arad responde: “Todo es posible”.
De cualquier forma, las posibilidades futuras de “Spiderman” son nuevamente ilimitadas. “Esto puede generar muchas películas”, advierte Arad, augurando un buen escenario para el personaje.
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