No hacía ni 24 horas que se habían visto en persona por primera vez, pero eso bastó a la joven Lesya para permitir a su nuevo novio, el famoso tatuador rumano Rouslan Toumaniantz, grabarle en el rostro su nombre con gigantes letras góticas, según ha informado el MailOne.
La pareja, que se conoció a través de la web, estuvo de acuerdo en "romper el hielo" de esta manera en su primera cita, algo que no debió resultar extraño para Toumaniantz, quien fue denunciado en 2009 por tatuar 56 estrellas en la cara de una joven que, según dijo, sólo le había pedido tres.
Por suerte, en este caso Lesya afirmó estar contenta con el resultado final: "Es un símbolo de nuestra devoción eterna. Además, me gusta tatuarme cada centímetro del cuerpo". A su vez, no detuvieron en este punto su original relación, pues, tras pensarlo durante algunos días, la joven y el tatuador decidieron contraer matrimonio.
Por el bien de Lesya, y para evitar que se encuentre en un futuro problema, más vale que sigan juntos durante mucho tiempo.
La pareja, que se conoció a través de la web, estuvo de acuerdo en "romper el hielo" de esta manera en su primera cita, algo que no debió resultar extraño para Toumaniantz, quien fue denunciado en 2009 por tatuar 56 estrellas en la cara de una joven que, según dijo, sólo le había pedido tres.
Por suerte, en este caso Lesya afirmó estar contenta con el resultado final: "Es un símbolo de nuestra devoción eterna. Además, me gusta tatuarme cada centímetro del cuerpo". A su vez, no detuvieron en este punto su original relación, pues, tras pensarlo durante algunos días, la joven y el tatuador decidieron contraer matrimonio.
Por el bien de Lesya, y para evitar que se encuentre en un futuro problema, más vale que sigan juntos durante mucho tiempo.
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