LA BARQUITA

Presidente promete salida total a males

DANILO MEDINA SE REÚNE CON DIRIGENTES COMUNITARIOS DEL SECTOR

Al cumplirse el primer mes de su gobierno, el presidente Danilo Medina encabezó ayer un encuentro con representantes de unas 70 organizaciones sociales del empobrecido sector La Barquita, donde anunció el rescate total de esa parte de la ribera oriental del río Ozama y rompió el protocolo de la seguridad para mezclarse con cientos de pobres y dirigentes peledeístas que lo esperaban en la espaciosa avenida San Vicente de Paúl, de Los Mina.

“Recibimos unas 40 propuestas de distintos grupos, a través del padre Gregorio Alegría, de la parroquia San Vicente de Paúl, y nos comprometemos a iniciar los trabajos a partir del próximo año, porque ahora no tenemos fondos”, dijo Medina, recibiendo la acogida de los comunitarios.

En el mismo lugar, cuestionado por los periodistas, el gobernante hizo un breve recuento de las ejecutorias del gobierno en sus primeros 30 días, y dijo que todas sus acciones se enmarcan dentro del programa que presentó al país en la campaña electoral y en su discurso de toma de posesión.

Medina prometió que los fondos para el saneamiento de la ribera oriental del Ozama, que incluye La Barquita de Los Mina y Sabana Perdida, serán incluidos en el Presupuesto del año 2013.

“Es necesario que busquemos una solución al drama que están viviendo tantas familias, que cada vez que llueve tienen que abandonar sus casas”, dijo Medina, tras recordar un “spot” televisivo de la Unesco, que presenta a un niño que cuando veía al locutor del informe del tiempo, aunque éste no hablara, se llenaba de pánico porque después de eso su casa siempre se inundaba.

En el encuentro, que tuvo lugar en el salón parroquial, Medina informó que en los próximos días designará mediante decreto una comisión que se encargará de trabajar en el proyecto que, junto a la comunidad, el gobierno desarrollará para solucionar el problema que enfrenta La Barquita con la crecida del río Ozama.

La comunidad estará representada por el padre Gregorio Alegría, párroco de la Iglesia San Vicente de Paúl, quien además servirá de enlace entre los comunitarios y el gobierno.

El gobernante pidió a los grupos sociales y comunitarios que deben evitar nuevos asentamientos de familias, porque si se permiten otras invasiones no se podrá dar una solución definitiva al problema.

“Hay que parar definitivamente la construcción de nuevas casuchas y viviendas en la margen del río, y las juntas de vecinos tienen que colaborar, porque el gobierno no puede disponer de recursos para gente que no está hoy y aparezca mañana”.

Medina dijo que la solución más práctica es el desalojo de quienes construyeron en el mismo lecho del río, y construir viviendas en la zona más elevada y firme, de modo que puedan facilitárseles también a los de más abajo. “Hay que permitir que las familias permanezcan en el entorno en que están acostumbradas a vivir y a trabajar, pero proporcionándoles condiciones dignas”, precisó.

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PRESENTAN PROPUESTAS AL JEFE DE ESTADO
Entre las demandas, leídas por la dirigente comunitaria Esther Martes, se pide la reubicación de las familias que viven en la zona de mayor riesgo de inundación, el rescate y dragado del río Ozama y la construcción de un muro de contención tipo malecón.

También propusieron la construcción de una zona ecológica protegida por el Ministerio de Medio Ambiente, el saneamiento de las cañadas, la construcción de una planta de tratamiento de aguas residuales y la creación de un centro de primer nivel de atención primaria.

Los dirigentes comunitarios presentes en el acto agradecieron al presidente Medina por su disposición de enfrentar el drama que viven cada vez que en el país se presenta una tormenta tropical.

En el encuentro participaron también los ministros de Salud, de Obras Públicas y Administrativo de la Presidencia, quienes tendrán la responsabilidad de trabajar en La Barquita, así como los alcaldes de los municipios Santo Domingo Este y Santo Domingo Norte, y la senadora de la provincia Santo Domingo, Cristina Lizardo.